Grafiteros
Hay un tipo de arte urbano, los grafitis, que hace colisionar la libertad de expresión con el legítimo derecho por parte de la ciudadanía a tener una ciudad limpia y agradable. No me gusta que estos jóvenes se apropien de cualquier espacio y plasmen sus dibujos y caracteres sabiendo que están cometiendo un delito o falta. Me parece perfecto cuando hay un encargo o aprobación en un solar o edificio por parte del propietario, pero eso de ir por las bravas a pintar paredes, trenes, autobuses… no es admisible. No se puede invocar la libertad de expresión cuando hay normativas muy claras al respecto. Y por cierto, si son condenados de nada sirve ponerles una multa porque se declaran insolventes. En el caso de los menores deberían pagar sus padres y si son mayores de edad, su condena debería ser limpiar precisamente lo que han pintado indebidamente.
Luis Solanas Cebolla. Zaragoza
Una narrativa visual para rastrear al virus
Los lectores se interesan más por las cifras y los gráficos porque les explican mejor la p…