Asesinado en Venezuela un empresario español al que intentaron robar

Natural del municipio burgalés de Celadilla-Sotobrín, fue asaltado y disparado por cuatro encapuchados

El empresario burgalés Sergio Santamaría falleció el domingo a causa de los disparos de cuatro encapuchados que intentaron robarle el coche y que también hirieron a su chófer en el municipio Simón Bolívar de Venezuela.

El suceso se produjo el pasado viernes en una carretera de esa localidad venezolana por la que circulaban el empresario, de 79 años y natural de Celadilla-Sotobrín (Burgos), y su chófer cuando fueron asaltados por cuatro encapuchados para robarles el vehículo y sus pertenencias, según adelanta el ‘Diario de Burgos’.

Cuando el conductor intentó zaparse de los asaltantes, estos les dispararon y tanto Sergio como su chófer resultaron heridos, aunque lograron, según el relato de su hermano Hipólito Santamaría, llegar al hospital más cercano para ser atendidos. El empresario burgalés fue operado, pero el domingo falleció al no poder superar las heridas.

El alcalde de Celadilla-Sotobrín, José Luis Riocerezo, ha indicado que aunque llevaba más de diez años fuera, primero en Chile y luego en Venezuela, seguía muy en contacto con el pueblo, que solía visitar con cierta frecuencia.

Su sobrino Carlos ha explicado que los restos de su tío fueron incinerados este lunes, tras un oficio religioso en la localidad donde residía, Ciudad Ojeda, «donde era una persona muy conocida y querida».

Librerías

Sergio Santamaría estaba casado con una ciudadana chilena, tenía tres hijos, y llevaba varios años viviendo en Venezuela. Dos de sus hijos viven en Venezuela y el tercero en Estados Unidos.

Sergio se fue de su pueblo a los 16 años, primero a Chile y después a Venezuela, donde su sobrino ha explicado que regentaba dos librerías, una de ellas la librería San Agustín, la más grande de Ciudad Ojeda, lugar de referencia para buscar libros difíciles de encontrar.

«Era un enamorado del pueblo donde nació, aunque su situación familiar hacía imposible que regresara de manera definitiva», ha explicado.

El fallecido era el quinto de siete hermanos, de los que solo viven ya cuatro, uno de ellos un religioso que también reside en Venezuela, en una localidad próxima a Ciudad Ojeda.